Confeccione con tela negra un muñeco que represente a la persona a la cual desea realizar el conjuro. Luego consiga tierra de cementerio con la que rellenará el muñeco y clávele tres alfileres. Uno en el abdomen, otro a la altura de la cabeza, y el tercero a la altura del corazón. Se deberá realizar durante una noche de luna menguante. Esa noche con el muñeco en sus manos pronuncie el siguiente conjuro: "Por siempre serás mi esclavo y nadie podrá alejarme de ti. Yo y nadie más que yo podrá dominarte".